Esta receta ha nacido de una coincidencia feliz. Bueno, en realidad podríamos decir que nació de la necesidad, porque quería hacer algo para el almuerzo y no tenía muchos ingredientes en la nevera. Había pensado hacer una ensalada con alubias y poner para el postre unas mangas riquísimas que había encontrado de casualidad. Pero ¡ay!, no había tarro de alubias en la despensa y no me daba tiempo de remojar las secas. Saqué un paquete de lentejas pardinas y empecé a combinar ingredientes sobre el poyo de la cocina. No tenía limón para el aliño, pero sí un tarro completo con la pulpa de varias parchitas que había vaciado el día anterior. No me imaginaba que el resultado iba a ser una de las ensaladas más originales y ricas que se me han ocurrido.
Aliñar las ensaladas con parchita
No hace mucho descubrimos que la parchita, maracuyá o fruta de la pasión es deliciosa no solo para postres, sino también para aliñar ensaladas. Si como a mí no te entusiasman sus pipas, el truco para colar el jugo y sacar la mayor parte posible de pulpa es calentarla un poco primero. Pásala después por el colador y aplasta con una cuchara para sacar todo el jugo, intensamente dulce y ácido a la vez. Después combínalo en abundancia con otros ingredientes: no hay miedo a que su sabor tome demasiado protagonismo. Lo más probable es que notes un gusto exquisito pero no muy fácil de identificar. Tiene acidez, sin duda, suficiente para sustituir el limón si lo añades de forma generosa, y dulzura sobrada para redondear el aliño.
Temporada de mangos
Aprovecha que empieza la temporada de mangos. ¡Entre septiembre y octubre es el mejor momento para disfrutar de esta fruta maravillosa!
En Canarias distinguimos entre mangos y mangas. Los mangos son pequeños y dorados, mientras que las mangas son grandes, verdes y rojizas (en la Península las suelen conocer como mangos). Me vuelven loca estas últimas, mejor si están verdosas, preparadas de mil maneras. Cuando las veo a buen precio, arramblo con un par de kilos y luego decido qué voy a hacer con ellas. En casa las comemos sobre todo en ensaladas o en curry.
Lentejas pequeñas en ensalada
Lo bueno de las legumbres es que convierten cualquier ensalada en una comida completa, porque le añaden mucha proteína y carbohidratos complejos (eso es: de los sanos, no de los que queremos evitar). La lenteja tiene la gran ventaja de que a menudo no necesita remojo (aunque puedes remojarla para reducir el tiempo de cocción). Me encantan las lentejas pequeñas en ensalada: pardina, verdina, caviar. Mantienen su forma y quedan sueltas si tienes la precaución de dejarlas tiernas pero ligeramente al dente, sin que se pasen de cocción ni se pongan demasiado blandas. El horno de vapor es una gran ayuda porque quedan muy bien de punto, pero también puedes hacerlas a fuego moderado a bajo, vigilando la cantidad de agua.
Los toques maestros: cebolla roja, bacon salteado, cilantro, mostaza, yogur
No es que yo me haya venido arriba, sino que, verdaderamente, la ensalada ha quedado divina. La hemos hecho dos veces y hemos triunfado las dos. La combinación que te propongo me parece perfecta, pero, como para gustos hay colores, cambia y sustituye a placer. ¡Después de todo, es eso lo más divertido de la cocina!
Ensalada tibia de mango y lenteja pardina con parchita y cilantro
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Ingredientes
- 300 gr lenteja pardina u otra lenteja pequeña
- 1 cucharadita sal gorda
- 50 gr bacon en lonchas o taquitos
- 50 gr cebolla roja (media cebolla pequeña o un cuarto de cebolla grande)
- 1/2 manojo de cilantro fresco
- 3-4 mangos medianos, mejor verdosos (mangas, en Canarias)
Aliño de parchita, mostaza y yogur
- 2 cucharaditas mostaza de Dijon
- Pulpa de 4 parchitas
- 1/4 cucharadita sal fina
- 5 cucharadas aceite de oliva virgen extra
- 5 cucharadas yogur natural (sin edulcorar)
- 2 ramitas de hierbabuena
Elaboración paso a paso
- Pon las lentejas en una bandeja de horno de acero pequeña con el doble de su volumen en agua y la sal. Remueve para que la sal se reparta bien y mete al horno en el carril 2. Programa vapor 100 % (Bosch intensidad 3 / AEG vapor solo), temperatura 100 ºC durante 30 minutos aproximadamente. El tiempo varía según el tipo de lenteja y el horno, así que es necesario ir probando a partir de los 20 minutos hasta que estén tiernas pero aún tengan consistencia. Si no tienes horno de vapor, guisa con el agua en una cacerola tapada a fuego lento hasta que estén en el punto perfecto y vigila que no se sequen, añadiendo agua si es preciso.
- Pela los mangos y corta en dados pequeños.
- Pela la cebolla y rebana, preferentemente con una mandolina, en una juliana tan fina como el papel.
- Si el bacon está en lonchas, corta en bastoncitos. Fríe dos minutos en la plancha y reserva.
- Separa las hojas de cilantro de sus tallos, y reserva. Puedes picar si no te gusta muy grande, o dejar las horas enteras.
- Riega las lentejas con un tercio del aliño y mezcla con mucho cuidado para que no queden pastosas. Coloca en el fondo de un cuenco o fuente transparente para que se vean las capas de la ensalada.
- Cubre con la juliana de cebolla. Coloca a continuación las hojas de cilantro y los taquitos de bacon. Riega con otro tercio del aliño y cubre con el mango troceado. Decora con una ramita de hierbabuena o de cilantro y sirve con el tercio de salsa restante en salsera.
Aliño de parchita, mostaza y yogur
- Calienta la pulpa de la parchita durante 30-40 segundos en el microondas y vuelca sobre un colador de acero fino. Exprime con una cuchara sopera para sacar el jugo.
- Coloca la mostaza en un cuenco mediano. Añade el jugo de la parchita poco a poco, batiendo.
- Separa las hojas de hierbabuena de sus tallos y pica muy finamente. Añade al aliño junto con el yogur, el aceite y la sal y mezcla bien.
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4 comentarios en «Ensalada de mango y lentejas con parchita y cilantro»
Receta fantástica de sabores frescos
¡Muchas gracias, Marta! Sé que te encanta el mango, como a mí. Esas cinco estrellas me llegan al alma 😀
La ensalada tal cual resulta riquísima y muy fresquita para días calurosos. La última vez me atreví a hacer un cambio y sustituí el bacon por aguacate y también resulta espectacular
¡Lourdes, el otro día la hicimos según esta sugerencia que nos habías dado! Vino a comer Javier y le encantó. Pasó la prueba con nota, jeje. Ah, por cierto: él sugirió un poco menos de parchita en el aliño, tres en vez de cuatro. Tal vez porque las que teníamos eran bastante ácidas.
Tu variación de los aguacates es deliciosa y permite hacer una versión saludable cien por cien. ¡Muchísimas gracias! Si hay algo que nos priva es que la gente haga suya la receta.
Un abrazo.